Canon EF 35/2 IS USM
Compratir
Las longitudes focales a 100mm han sido las grandes beneficiadas de los diferentes sistemas de estabilización de cada fabricante. Así, el zoom 70–200/2.8 es una de las ópticas que toda marca ofrece ya con estabilizador, llámese IS en Canon, VR en Nikon o VC en Tamron. También los últimos objetivos macro con distancias focales cercanas a los 100mm vienen ya con un sistema de estabilización, como el Canon 100/2.8L IS USM o el nuevo Tamron 90/2.9 VC. Hasta ahora, los angulares eran los únicos objetivos dejados de la mano de la estabilización.
Canon ha lanzado tres angulares que incorporan el sistema de estabilización IS; con distancias focales de 24, 28 y 35mm los nuevos angulares estabilizados de Canon incorporan un nuevo diseño óptico que mejora las prestaciones de los modelos no estabilizados, superando en resolución y contraste a los modelos anteriores, a la vez que muestran una mayor corrección en la distorsión y las aberraciones cromáticas.
En las manos
Lejos de ser un objetivo orientado al segmento profesional (los materiales de construcción así lo definen), el nuevo angular EF 35/2 IS USM ofrece un diseño exterior totalmente diferente, con unas dimensiones más rotundas que el modelo anterior. El diámetro de este objetivo y del elemento frontal (ø67mm) se corresponden más a ópticas de gama profesional que de aficionado y supone un aumento considerable en dimensiones, respecto al modelo anterior no estabilizado. El peso –gracias al uso de materiales plásticos de alta densidad– se aligera y apenas varía con el modelo no IS.
Ergonomía
El material plástico recuerda mucho al de los objetivos Tamron de última generación, como el zoom 70–200/2.8 VC o el nuevo 90/2.8 VC Macro, que sin alcanzar las cotas de seguridad y durabilidad del metal ofrece una muy buena relación entre peso y resistencia. El aro de enfoque se me antoja estrecho, dadas las dimensiones de este objetivo, si bienlal excelente respuesta de su motor USM lo convierte en una de las mejores ópticas para trabajar en modo AF. Incorpora dos interruptores de selección, para el sistema AF y el sistema de estabilización IS.
Características técnicas
Construido por 10 elementos en 8 grupos ópticos, el nuevo Canon EF 35/2 IS incorpora 8 hojas en su diafragma, que junto a la distancia mínima de enfoque de 24cm. determinan un efecto bokeh extremo. El sistema de estabilización IS garantiza –con buen pulso– imágenes libres de trepidación a velocidades de obturación tan cortas de 0,4 segundos, sin apoyo alguno.
Prestaciones
La distancia focal de 35mm es –en mi opinión– el verdadero objetivo estándar, ya que ofrece un ángulo de visión ligeramente superior al 50mm pero sin ofrecer una sensación de angular. Las dimensiones de este 35mm superan incluso las del 50/1.4 de Canon, especialmente en diámetro. Es una distancia focal óptima para el reportaje, pues carece de la distorsión propia de los angulares y permite realizar un retrato, enmarcado en su ambiente natural. Es igualmente una de las ópticas más adecuadas para fotografiar grupos, siendo muy apreciada por los profesionales de la fotografía social.
La competencia
El principal competidor del nuevo Canon 35mm estabilizado es el objetivo Carl Zeiss Distagon 35/2, un modelo de enfoque manual no estabilizado, pero que por precio se encuentra en un segmento similar y por prestaciones ópticas, sensiblemente por encima del nuevo modelo estabilizado de Canon. Tan solo la dependencia del sistema AF hará que el usuario de la distancia focal más versátil se decante por el modelo con enfoque automático de Canon o el clasicismo y excelencia óptica del modelo Zeiss.
Abertura máxima de ƒ/2
Un diafragma de ƒ/2 y el sistema estabilizador IS convierten al nuevo 35/2 IS en el aliado perfecto para disparar en pésimas condiciones de luz y sensibilidades medias; la gran abertura de ƒ/2 permite aprovechar la luz ambiente y jugar con los enfoques críticos y puntuales de una zona en concreto, para remarcar la fuerza e intensidad de una escena o personaje; el efecto bokeh en motivos enfocados en las distancias más cortas es elevado, pero alejado de la brutalidad de otras ópticas ultraluminosas.
Sistema IS
El estabilizador del nuevo Canon EF 35/2 IS se ha revelado tan excelente como el que incorpora el zoom 24–70/4L IS, de reciente aparición. Se han logrado imágenes libres de trepidación a velocidades de apenas 0,4″ segundos sin apoyo alguno, pero recomiendo no pasar de 1/10seg. para asegurar todos los disparos a mano alzada. El estabilizador permite disparar en condiciones de luz adversas a diafragmas cerrados y valores ISO medios y bajos. La imagen inferior se disparó a una décima de segundo, una abertura de ƒ/6.7 y una sensibilidad de ISO 100.
Contraste
El contraste es excelente a ƒ/3.5 y decae a suave a la máxima abertura de ƒ/2; a partir de ƒ/4 el contraste se mantiene fijo en un grado óptimo, sin ser la óptica más contrastada de Canon. Se aprecia una muy ligera dispersión a máxima abertura. La fidelidad y contraste del color responden de igual manera al contraste general de la foto.
Resolución lineal
Pese a no ser una óptica de la serie “L”, el nuevo 35/2 IS ofrece una elevada riqueza en el detalle, incluso a máxima abertura. La resolución lineal convierte al Canon EF 35/2 IS USM en una óptica especialmnete útil para diarios y revistas, que precisan del máximo detalle, así como también como objetivo para lograr ampliaciones con una elevada calidad de imagen para exposiciones fotográficas.
Distorsión y aberraciones
Pese a ser la distancia angular más moderada, se observa una distorsión ligeramente apreciable, con una fuga casi imperceptible y un efecto barril muy moderado. Basta situar el objetivo en posición paralela al suelo para eliminar todo rastro de distorsión, si bien mantiene la tendencia al efecto barril. Se aprecian aberraciones cromáticas significativas en situaciones de máximo contraste lumínico, así como en superficies metálicas.
Pruebas y resultados
Todas las fotografías se han realizado con una Canon EOS 5D Mark III en los modos de exposición manual y prioridad de abertura; los diafragmas utilizados oscilan entre ƒ/2 y ƒ/11, siendo las aberturas más cercanas a ƒ/2 las más recurridas. Todas las imágenes se han capturado en formato RAW y se han procesado posteriormente con Adobe LightRoom. El balance automático de blancos ha ofrecido una respuesta correcta en todas las situaciones y las sensibilidades utilizadas están comprendidas entre 100 y 1.600 ISO.
Conclusión
La primera generación de angulares estabilizados llega de la mano de Canon y el 35/2 IS mejora las prestaciones de la antigua versión no estabilizada, con un mayor contraste y resolución lineal. La construcción –mejorable a mi entender– de plástico de alta densidad en su exterior aligera el peso, a cambio de perder robustez y resistencia. El aro de enfoque es –en mi opinión– demasiado estrecho, dadas las dimensiones del objetivo.
El contraste y el detalle que ofrece el nuevo angular estabilizado –sin alcanzar las cotas de la serie “L” de Canon– permiten conseguir fotografías con una elevada calidad de imagen, mientras que el sistema estabilizador IS garantiza imágenes libres de trepidación a velocidades de apenas 0,5 segundos, a mano alzada y sin ningún tipo de apoyo. Observo una clara mejoría en el sistema de estabilización de los últimos modelos Canon IS, muy cercana –sino superior– a la que ofrece el sistema VC de Tamron.
La abertura de ƒ/2 proporciona imágenes con un bokeh cremoso y muy acentuado, pero progresivo y no traumático; a la distancia mínima de enfoque (24cm.) y máxima abertura la profundidad de campo es crítica, casi dramática y precisa de muy buen pulso para “clavar” el foco en el punto preciso. El precio (inferior a 800 euros) será uno de los obstáculos a salvar por el primer angular fijo con sistema de estabilización de Canon.
Lo mejor
- calidad óptica
- abertura máxima de ƒ/2
- sistema de estabilización IS
- distancia mínima de enfoque de 24cm.
- prestaciones
- velocidad de enfoque
- enfoque silencioso (motor USM)
- acceso a los controles de enfoque y estabilización
- parasol de pétalo muy efectivo
Mejorable
- materiales de construcción
- ligeras aberraciones cromáticas
- efecto barril
- precio (790 euros)