Sony A7R

Cada cierto tiempo Sony revoluciona el mercado de la electrónica con productos que marcan una época; así llegaron el walkman, el minidisc, el sistema de vídeo Betamax, la PlayStation o el sistema de espejo traslúcido de las cámaras SLT. La experiencia de Sony en el terreno de las cámaras mirrorless ha permitido a los amantes de la fotografía gozar de cámaras como la NEX-7, uno de los mejores modelos sin espejo de la historia de este segmento y que sentó las bases para el nacimiento del concepto de la A7R.

La A7R es –básicamente– una cámara mirrorless de formato completo. El diseño nos recuerda al de una réflex de dimensiones ultra compactas, pero bien podría mantener el diseño telemétrico de las NEX. Sus dimensiones compactas pueden llamar a engaño: debajo de su piel de cordero se esconde un auténtico lobo fotográfico.

En las manos

La ausencia de la caja del espejo de las cámaras réflex permite “adelgazar” el cuerpo de la A7R hasta un grosor idéntico al de los modelos mirrorless, eliminando buena parte del peso final de la cámara. Su aspecto recuerda el de las réflex, pues la zona destinada al pentaprisma encierra el visor electrónico, tal como sucede en las Olympus OM-D o en la X-T1 de Fujifilm.

En la parte superior de la cámara tan solo encontramos la leva de puesta en marcha, el disparador, un botón de funciones personalizadas y los diales de modos de exposición y compensación de exposición. La parte frontal dispone de uno de los dos diales de control, situado sobre la empuñadura.

En la tapa trasera se encuentran la pantalla LCD de 3″ y los botones de acceso al menú, acceso a vídeo, dos botones de funciones personalizadas, selector de bloqueo de exposición AE-L/selector de modo de enfoque AF/MF, acceso rápido a menú (Fn), display, acceso al balance de blancos, temporizador/modo de disparo, revisión y borrado de las capturas. El segundo dial de control se encuentra a la altura natural del pulgar.

Diseño y ergonomía

El diseño de la A7R muestra –en mi opinión– cierta falta de ambición fotográfica, pues en demasiadas ocasiones debe recurrirse al menú (o al menú rápido “Fn”, con menos parámetros incluidos que en otras cámaras de la marca). Otos modelos, como la Fuji X-T1, han resuelto el acceso a la mayoría de parámetros importantes gracias un diseño 100% fotográfico tradicional. Los tres botones de funciones personalizadas son –para mí– insuficientes para ofrecer la máxima versatilidad en el manejo de la A7R y tampoco su disposición es la más óptima.

El acceso a algunos botones y controles es difícil, en especial los dedicados al botón personalizado C2, el acceso de vídeo directo (situado en el lateral derecho de la cámara) y el dial frontal de control, que podemos confundir con el final de la empuñadura de la cámara. Personalmente, hubiera preferido una disposición con un mayor número de diales y botones dedicados en la tapa superior de la cámara, que evitarían al usuario de la A7R entrar a los menús. Asimismo, la botón de acceso rápido a menú “Fn” dispone de un número más reducido de funciones que otros modelos de la marca, como las cámaras A850 y A99.

Características técnicas

El nuevo buque insignia de Sony ofrece la mayor resolución en una cámara full frame: 36,4 millones de píxeles y comparte el mismo sensor que la Nikon D800 E, uno de los monstruos del mercado réflex. Pese a ser una cámara de formato completo (full frame), la A7R no incorpora la tradicional montura A de las ópticas Alpha, sino la E de los modelos NEX. Basta montar los objetivos de la serie A en un adaptador y disfrutar de las ventajas del formato full frame.

Las principales características de la A7R son:

• sensor de 36,4 millones de píxeles de resolución, sin filtro de paso bajo
• visor electrónico de 2,36 millones de píxeles
• sistema AF con 25 puntos de detección de foco
• velocidades de obturación: 1/8.000–30 segundos
• cadencia máxima de disparo: 4 imágenes por segundo
• escala de sensibilidades: 50–25.600 ISO
• 3 modos de medición de luz
• 16 modos de balance de blancos
• pantalla LCD de 3″ y 921.600 píxeles de resolución, de ángulo variable
• 9 modos de exposición
• 9 modos de escena
• 13 filtros creativos
• vídeo Full HD 50p
• transmisión inalámbrica vía Wi-Fi
• conexión inalámbrica vía NFC
• cuerpo de aleación de magnesio
• sellado de los puntos más sensibles a polvo, humedad y salpicaduras

Modos de exposición

La A7R es muy probablemente la cámara de formato full frame con mayor número de modos de exposición; dispone de los modos tradicionales incorporados en las réflex, además de otros, más propios de las cámaras mirrorless. La A7R incluye los modos de exposición:

• manual
• prioridad de abertura
• prioridad de obturación
• programable
• auto programable
• modo de escena
• panorama
• vídeo
• 2 modos de exposición personalizados

Modos de escena

Ya son muchos los modelos SLR de gama media que incorporan los modos de escena como una opción más; los modos de escena nacieron para compensar la ausencia de modos de exposición de las cámaras compactas y posteriormente han pasado a los modelos mirrorless. La Sony A7R incorpora los modos de escena:

• retrato
• acción deportiva
• macro
• paisaje
• puesta de sol
• escena nocturna
• crepúsculo manual
• retrato nocturno
• anti movimiento

Filtros creativos

Al igual que los modos de escena, los filtros artísticos se han implementado en cada vez más segmentos y en la actualidad ya son varios los modelos réflex que los incorporan, como una forma más de expresión fotográfica. Además de la variedad, el usuario debe valorar la calidad de los efectos mostrados y Sony es uno de los fabricantes –junto a Olympus y Fujifilm– que mejores resultados ofrecen.

El usuario podrá variar el grado de efecto de algunos filtros. Los filtros creativos de la A7R son:

• cámara de juguete
• color pop
• posterización (color y blanco y negro)
• foto retro
• clave alta
• color parcial (rojo, verde, azul, amarillo)
• monocromo de alto contraste
• enfoque suave (bajo, medio y alto)
• pintura HDR (efecto bajo, medio y alto)
• monocromo tonos ricos
• efecto miniatura (horizontal, abajo, arriba, derecha, izquierda, vertical, automático)
• acuarela
• ilustración (bajo, medio y alto)

Un nuevo concepto de cámara

La nueva Sony A7R es el primer modelo mirrorless que incorpora un sensor full frame, sentando las bases del que –para mí– será el futuro de la fotografía. No en vano, Nikon ya ha adquirido a Sony la patente del sistema para una cámara sin espejo y formato full frame. Y si Nikon se sube al barco, alguien duda que Canon se quedará en tierra?

La versatilidad del sistema ILCE (cámaras de óptica intercambiable de montura E) es muy amplia, tanto para el modo foto, como –en especial– en vídeo; al carecer de espejo, el sistema de enfoque automático funciona durante toda la grabación, a diferencia de lo que sucede con las cámaras SLR, que o bien se deben enfocar a mano o con un sistema AF realmente lento y nada preciso.

Sensor

El sensor es el factor –junto a ser la primera cámara mirrorless de formato full frame– más importante en una primera valoración de la Sony A7R. En mi opinión, más importante que la resolución superior de 36 Megapíxeles es la ausencia de un filtro de paso bajo el factor que diferencia a la nueva A7R del resto de modelos SLR de formato full frame, pues tan solo la Nikon D800 E incorpora en el segmento réflex un sensor (fabricado por Sony, el mismo de la A7R) sin filtro de paso bajo. Es preciso señalar que algunos modelos Fujifilm de la serie X ya disponen de sensores sin filtro de paso bajo, como la X100 S o la nueva X-T1.

Eliminar el filtro de paso bajo ofrece a la par tanto ventajas como problemas que no siempre se resuelven de manera satisfactoria. Al eliminar un elemento entre la óptica y el sensor, la calidad de imagen es superior, ofreciendo una mayor riqueza en el detalle. El problema surge al fotografiar motivos lisos y sin contraste (como telas), donde puede aparecer un efecto moaré no deseado.

Resolución de 36,4 millones de píxeles

Los sensores full frame ofrecían hasta ahora una resolución máxima de 24 Megapíxeles y modelos como la Sony A850 y la Nikon D3X (ambas compartían el mismo sensor, fabricado por Sony) mostraban una calidad de imagen excelente, además de permitir grandes ampliaciones. La relación entre ISO y calidad de imagen en estos sensores era más que aceptable al trabajar con sensibilidades altas, pero qué pasa con los nuevos sensores de mayor resolución?

Uno de los problemas que deben afrontar los últimos sensores full frame de más de 36 millones de píxeles es la señal de ruido al trabajar con sensibilidades elevadas; de hecho, se indica que la Nikon D800 E está especialmente diseñada para trabajar en estudio, con valores ISO bajos. ¿Es entonces la Sony A7R un modelo para disparar solo con sensibilidades medias y bajas? Gracias a la mayor experiencia de Sony en la electrónica, la A7R ofrece una solución excelente al trabajar a ISO altos: un mejor procesador de imagen y la posibilidad de seleccionar un modo multi disparo, que acumula información, pero no ruido. La fotografía inferior muestra un recorte al 100% de la imagen original, donde puede apreciarse la elevada calidad de imagen de los archivos.

Visor electrónico / pantalla LCD

Pese a preferir el clásico visor óptico, cada vez son más los visores electrónicos de cámaras mirrorless que me acercan peligrosamente al “lado oscuro”. El visor de la Sony A7R ofrece una calidad de visualización que pronto hace que nos olvidemos que estamos mirando a través de un visor electrónico. Tanto el color, como el detalle y la velocidad de refresco muestran una calidad comparable a la de los mejores visores del segmento mirrorless.

La pantalla LCD ofrece una respuesta desigual; sin alcanzar las cifras más elevadas del panorama actual, muestra una excelente visualización. Sin embargo, reacciona de manera extraña una vez se realiza el disparo y se comprueba la captura: al regresar al modo de visualización, la imagen aparece durante un muy breve espacio de tiempo completamente sobre expuesta y recupera la luminosidad correcta de manera paulatina.

Fotometría

La nueva Sony A7R dispone de una matriz con 1.200 zonas de medición, que porporcionan una medición precisa y exacta bajo cualquier situación lumínica, sin embargo he observado una ligera tendencia a la subexposición en condiciones con mucha luz. Los tres modos de medición de luz ofrecen resultados similares, pero es conveniente que el usuario sepa seleccionar el modo más adecuado a cada escena, según el motivo y la iluminación. Personalmente, prefiero trabajar con el modo ponderado al centro, que ofrece resultados más estables que los modos multizonal o puntual. Junto a la calidad del balance de blancos, es uno de los puntales de la calidad de las capturas.

Balance de blancos

Me ha sorprendido el sistema de balance de blancos de la Sony A7R, tanto por la excelente respuesta del modo automático, como por los 16 modos incorporados. La fiabilidad del modo automático de balance de blancos es máxima, incluso al disparar en interiores iluminados con luz artificial, ofreciendo archivos que apenas deben ajustarse posteriormente en la edición de las capturas.

Los modos de balance de blancos incluidos en la Sony A7R son:

• automático
• luz diurna
• sombra
• nublado
• incandescente
• fluorescente blanco cálido
• fluorescente blanco frío
• fluorescente blanco diurno
• fluorescente luz diurna
• flash
• submarino automático
• temperatura de color + filtro
• personalizado 1
• personalizado 2
• personalizado 3
• ajustes personalizados

Sistema AF

Se ha escrito y debatido mucho sobre el sistema de enfoque automático de la A7R y si bien no es el más rápido del mercado, la precisión es máxima. El sistema inteligente por detección de contraste facilita una mayor velocidad de enfoque, gracias al procesador Bionz X y al sensor CMOS Exmor de última generación, que incorpora un rendimiento excepcional, gracias a la compresión de la altura del circuito; esto aumenta de manera significativa la cantidad de luz que recoge cada píxel.

Aconsejo probar el sistema Direct Manual Focus (DMF), idóneo para el trabajo en estudio o en situaciones que no exista la necesidad de una respuesta muy rápida del movimiento. El sistema de enfoque DMF selecciona diversos puntos de enfoque, repartidos tanto en el centro de interés del motivo, como en los bordes o perfiles, logrando la máxima precisión en el enfoque. En modo de enfoque continuo (AF-C) el tiempo de reacción es superior al esperado, pero con práctica permite capturar escenas en movimiento.

Calidad de imagen

A diferencia de otros modelos réflex de la competencia destinados al trabajo en estudio, la nueva A7R permite trabajar tanto con sensibilidades bajas en estudio como con ISO altos en situaciones lumínicas muy pobres. El propio diseño de la A7R (similar al de una mirrorless) permite que el objetivo se sitúe mucho más cerca del sensor, motivo que aumenta la calidad de imagen. La fotografía inferior se disparó a 640 ISO, ƒ/8 y 1/20seg, condiciones que empiezan a ser críticas para muchas cámaras.

El conjunto formado por el sensor y el procesador de imagen determinan una calidad de imagen muy superior a cualquier réflex del mercado, incluias las de gama profesional. Tanto el detalle, como el contraste, el rango dinámico y la fidelidad cromática son excelentes, siendo un modelo excelente para trabajos que requieran la máxima calidad de imagen, como la fotografía de cuadros, láminas o joyería. El colgante de oro blanco y brillantes se disparó a ISO 50, un objetivo Tamron 90mm Macro a ƒ/22 y se iluminó con un equipo Bowens Gemini 1.500 Pro.

¿RAW o JPEG?

Uno de los aspectos que más favorablemente me han sorprendido en la Sony A7R es la excelente calidad de los archivos JPEG; el sistema de reducción de ruido mediante multidisparo facilita imágenes en JPEG con una calidad de imagen muy elevada, hasta 1.600 ISO. Puedo asegurar que los usuarios de la A7R podrán disfrutar de la máxima calidad de imagen disparando en JPEG con sensibilidades bajas y medias, sin necesidad de recurrir al RAW y su posterior procesado.

Respuesta a ISO altos

Uno de los aspectos más criticados en las cámaras full frame de más de 36 millones de píxeles de resolución es su comportamiento ante situaciones adversas de luz; el aumento de la señal de ruido y la pérdida de contraste, detalle y fidelidad en el color impiden a los usuarios de estas cámaras obtener el rendimiento esperado en un modelo de prestaciones profesionales bajo cualquier tipo de condiciones de luz.

La tecnología de expansión del fotodiodo aumenta el tamaño en cada uno de los píxeles para mejorar el rango dinámico del sensor y aumentar más la sensibilidad, mientras se mantiene un nivel de ruido reducido y se consigue una alta relación señal/ruido. El resultado son imágenes ricas en detalle, máxima fidelidad de color, señal de ruido contenida y un contraste que se mantiene, a pesar de utilizar sensibilidades elevadas. La fotografía superior se disparó a 3.200 ISO; la del interior de la igles, a 6.400 ISO.

Sistema de reducción mediante multidisparo

La A7R permite conseguir imágenes libres de ruido mediante el disparo de 6 imágenes consecutivas de una misma escena; el sensor aplica un cálculo instantáneo y en tiempo real de la exposición y reduce en 6 pasos la sensibilidad necesaria, a modo de ISO auto. Cada disparo es acumulativo y suma la exposición de todos los disparos, permitiendo obtener una imagen libre de ruido en condiciones de luz que obligarían a utilizar sensibilidades muy elevadas.

La fotografía superior muestra la fotografía de un cartel situado en una pared (oscura) de una estación del metro, que solo recibe la luz de la zona del andén. La exposición natural hubiera sido de 1/10seg. a 6.400 ISO, pero con el sistema multi RR de la A7R se pudo disparar a 1/30seg. y una sensibilidad de 800 ISO. Curiosamente, los datos Exif de la fotografía muestran los valores originales a 6.400 ISO.

Prestaciones

La máxima calidad de imagen que ofrece la Sony A7R la encamina hacia trabajos en museos, galerías de arte o estudios fotográficos profesionales, pero a la vez es una excelente cámara para la fotografía diaria en exteriores. Su cadencia de disparo máxima de 4 f.p.s. no la convierten en un modelo especialmente adecuado para la fotografía deportiva, pero salvo este ámbito fotográfico, pocos campos de la fotografía escapan a la elevada calidad de imagen y prestaciones de la nueva A7R.

Sus pequeñas dimensiones y unos objetivos sensiblemente más pequeños y ligeros que los del entorno réflex tradicional permiten utilizarla en entornos poco favorables hacia la presencia de un fotógrafo, como la instantánea urbana, el reportaje social o el fotoperiodismo.

Cámara de estudio

Ninguna réflex del mercado (incluidas las full frame de gama profesional) ofrecen una calidad de imagen tan elevada como la nueva A7R de Sony. Gracias a una sensibilidad mínima de ISO 50 es posible trabajar con equipos de iluminación muy potentes, pero bajar la abertura en uno o dos diafragmas, respecto a las cámaras que ofrecen sensibilidades mínimas de 100 y 200 ISO, respectivamente.

Basta disponer de un objetivo macro (como el “viejo” Tamron 90/2.8 con el que se realizaron las fotografías de joyas) para conseguir imágenes ricas en contraste y un detalle muy elevado. La amplia variedad de modos de balance de blancos permitirá al profesional de la fotografía de producto (en este caso, joyería) ofrecer a sus clientes la máxima calidad de imagen del segmento full frame, pues tan solo Hasselblad es capaz de mostrar una calidad superior.

Modo vídeo

Si algo ha caracterizado a las cámaras fotográficas Sony es su excelente respuesta en modo vídeo. Tanto el sistema AF de la A7R como la calidad de imagen y sonido superan con creces al de las mejores réflex. La calidad Full HD 1080 50p proporciona clips de vídeo ricos en información y detalle, características que pueden convertir a la nueva A7R de Sony en uno de los modelos preferidos por los realizadores de vídeo. La calidad de las ópticas Carl Zeiss proporciona un valor añadido y asequible para los precios que se manejan con los objetivos para vídeo.

Pruebas y resultados

Se ha utilizado el nuevo zoom Carl Zeiss 24–70/4 de montura E, diseñado especialmente para el formato full frame; asimismo, he podido disponer del adaptador LA-EA4, que permite montar las ópticas para las réflex Sony Alpha y utilizar los magníficos objetivos Carl Zeiss 24/2 y Carl Zeiss 135/1.8. Sé que he trabajado con algunas de las mejores ópticas del catálogo de Sony, pero no serán pocos los amantes de la fotografía que decidan adquirir una A7R además por la extraordinaria calidad de algunos objetivos Carl Zeiss para las diferentes monturas Sony. Todas las fotografías de estudio se realizaron con un Tamron SP 90/2.8 Macro (versión no estabilizada).

Las fotografías se han disparado utilizando un amplio número de modos de exposición, así como varios modos de escena y filtros creativos. Las sensibilidades seleccionadas oscilan entre 50 y 6.400 ISO, obteniendo una calidad de imagen en ISO altos muy superior a la esperada. Hasta 1.600 ISO la calidad de imagen es simplemente sensacional, superando la que ofrece cualquier modelo réflex de formato full frame del mercado. Los archivos JPEG ofrecen una excelente calidad de imagen, gracias a la excelente respuesta del sistema automático de blancos y la fotometría.

Conclusión

La nueva A7R de Sony es el primer modelo con sensor de formato full frame mirrorless y tan solo un diseño poco fotográfico empaña al primer modelo “réflex sin espejo” de prestaciones profesionales. Ser el pionero en un nuevo concepto conlleva reticencias y –especialmente– un gran desconocimiento por parte de los usuarios, tanto de modelos réflex, como de cámaras mirrorless. Personalmente, considero que los más de 36 Megapíxeles son excesivos para la mayoría de trabajos profesionales y me pregunto qué resultados se obtendrían (especialmente a ISO altos) con un sensor sin filtro de paso bajo y 24 millones de píxeles de resolución.

Los materiales de construcción son excelentes, si bien la superficie lisa puede convertirse en un problema para para conseguir una perfecta sujeción en ambientes cálidos y húmedos. A la posibilidad de montar las ópticas de la serie Sony Alpha (mediante adaptador) se une a una creciente gama de objetivos de la serie E para el formato full frame, entre ellos, verdaderas joyas ópticas fabricadas por Carl Zeiss. El diseño es menos fotográfico que otros modelos de la competencia, que han sabido ofrecer una mejor ergonomía.

La calidad de imagen de la A7R es soberbia, siendo el modelo que mejores prestaciones ofrece a los profesionales de la fotografía de producto o de reproducciones que precisan el máximo detalle y fidelidad cromática. Es –para mí– la mejor cámara para trabajar en estudio, aparte de Hasselblad, por lo que no sería extraño que en unos meses aparezca en el mercado un nuevo objetivo macro diseñado por Carl Zeiss para la montura E, la óptica natural para trabajar con la A7R.

En ISO altos, la respuesta de la A7R es mejor de lo esperado (vistos los resultados de la D800 E); el diseño del sensor y la respuesta del procesador de imagen en ISO altos son mejores que en otros modelos de la competencia. El precio y un nuevo concepto que el público deberá empezar a entender y aceptar serán los únicos escollos a salvar por aquellos fotógrafos que deseen tener la cámara de formato full frame que ofrece mejor calidad de imagen del mercado actual.

Fotografías: Pep Costa / Lorenzo Fuentes

Agradecimientos:

Ramón Joiers

Travel & Cake

Lo mejor

• materiales de construcción
• calidad de imagen soberbia
• resolución de 36,4 Megapíxeles
• respuesta a ISO altos
• calidad del visor electrónico
• precisión del sistema AF
• respuesta del balance de blancos
• fotometría precisa
• calidad de los archivos JPEG
• amplia variedad de modos de exposición, modos de escena y filtros creativos
• rápida conexión vía NFC
• modo vídeo Full HD 1080 50p

Mejorable

• ergonomía y diseño
• escasas funciones del menú rápido (Fn)
• velocidad del sistema AF
• cadencia máxima de disparo
• autonomía de la batería
• precio: 1.965 euros

Valoración

• construcción:
• ergonomía y diseño:
• prestaciones:
• calidad de imagen:
• respuesta a ISO altos:
• fotometría:
• balance de blancos:
• sistema AF:
• modo vídeo:
• relación calidad-precio:
• valoración personal: