Olympus OM-D E-M10 Mark III
Compratir
La llegada de las cámaras sin espejo supuso un soplo de aire fresco en una industria fotográfica anclada en la arcaica división entre cámaras compactas y réflex. Olympus se ha convertido –junto a Fujifilm y Sony– en los motores del mercado fotográfico, gracias a modelos que ofrecen una calidad fotográfica muy elevada y una excelente relación calidad-precio. ¿Supone la nueva Olympus OM-D E-M10 Mark III la evolución natural de las dos versiones anteriores o por el contrario es sólo una cámara de continuidad?
La versión original de la Olympus OM-D E-M10 ha sido el modelo de iniciación de muchos usuarios en la fotografía con ópticas intercambiables. Aspectos como la construcción, dimensiones, peso, facilidad de manejo, calidad de imagen y precio han convertido a la saga E-M10 en sinónimo de éxito en ventas y satisfacción de sus usuarios.
En las manos
Las cámaras Olympus de la serie OM transmiten una muy agradable sensación de comodidad en las manos; ya sea la pequeña OM-D E-M10 Mark III o el modelo OM-D E-M1 Mark II de prestaciones profesionales, las cámaras Olympus OM ofrecen una sujeción perfecta, incluso con los objetivos más grandes y pesados. Las dimensiones compactas y el peso ligero de la Olympus OM-D E-M10 Mark III se adaptan a todo tipo de manos, siendo uno de los modelos más adecuados para aquellos usuarios que no desean realizar una mudanza fotográfica cuando salen de vacaciones.
Ergonomía y diseño
La tapa superior de la Olympus OM-D E-M10 Mark III dispone de la leva de conexión, dial de modos de exposición, dos diales de control (el forntal incluye el disparador) y los botones dedicados a la grabación de vídeo y función personalizada. En la parte trasera de la Olympus OM-D E-M10 Mark III encontramos la pantalla LCD de 3″ multiángulo de tecnología táctil y los botones de acceso al menú, información de la pantalla LCD, visualización y borrado de las capturas y el navegador que incluye los acceso a la sensibilidad, zona de enfoque, flash y modo de disparo. Un segundo botón de función personalizada está dispuesto en un ángulo de 45º a la altura del pulgar.
Características técnicas
La Olympus OM-D E-M10 Mark III mantiene la misma resolución de 16,1 Megapíxeles de las dos versiones anteriores, pero incorpora el nuevo procesador de imagen TruePic VIII que mejora el rendimiento en la velocidad de transmisión de datos, necesaria a la hora de manejar los archivos de los vídeos grabados en calidad 4K. La tecnología táctil de la pantalla LCD facilita situar el punto de enfoque en cualquier parte de toda el área de la imagen pulsando ligeramente el motivo deseado.
Las principales características técnicas de la Olympus OM-D E-M10 Mark III son:
- sensor Micro 4/3 de 16,1 Megapíxeles
- procesador de imagen TruePic VIII
- estabilizador interno de 5 ejes
- 10 modos de exposición
- 25 modos de escena
- 8 modos avanzados de fotografía
- 15 filtros creativos
- 5 modos de fotometría
- 8 modos de balance de blancos
- sensibilidad: 100–25.600 ISO
- 6 modos de enfoque
- sistema AF con 121 puntos de detección de enfoque
- enfoque manual con 800 puntos de enfoque seleccionables
- visor electrónico de 2,36 millones de píxeles de resolución
- pantalla LCD de 3″, tecnología táctil, multiángulo y 1,04 millones de puntos
- cadencia de disparo máxima de 8,6 f.p.s.
- vídeo 4K
Prestaciones
El usuario tipo de la Olympus OM-D E-M10 Mark III es muy heterogéneo: desde el aficionado que busca una primera cámara de óptica intercambiable al usuario con experiencia fotográfica que desea obtener imágenes con una elevada calidad de imagen, pero sin cargar con el peso y dimensiones de una cámara réflex. Su tamaño convierte a la Olympus OM-D E-M10 Mark III en un modelo muy adecuado para los amantes de la fotografía de viajes, si bien es una cámara versátil y capaz de enfrentar con éxito una amplia de disciplinas fotográficas, desde el retrato o la fotografía de paisajes a la captura de instantáneas urbanas (street photo).
Olympus OM-D E-M10 Mark III: la saga continúa
La primera versión Olympus OM-D E-M10 ha sido una de las cámaras que más he recomendado a aquellos aficionados me preguntaban sobre qué modelo comprar, de manejo fácil y precio moderado, pero que ofreciera una calidad de imagen elevada. Creo que el concepto OM-D E-M10 es uno de los más acertados en el panorama fotográfico de segmento aficionado, pues el precio es uno de los factores determinantes a la hora de valorar la compra de una cámara.
Sin embargo, la Olympus OM-D E-M10 Mark III me parece un modelo que –salvo el vídeo 4K– aporta muy poco (en mi opinión, casi nada) en el apartado fotográfico a los usuarios de la versión anterior, por lo que dudo mucho que sea la cámara de continuidad para los miles de aficionados que esperaban una respuesta más arriesgada por parte de Olympus.
Modos de exposición
Las cámaras de segmento aficionado disponen de una amplia oferta de modos de exposición, pues suelen ser los modelos con que dan los primeros pasos los recién llegados al mundo de la fotografía. Por lo general, antes de llegar a una cámara de óptica intercambiable (ya sea réflex o mirrorless) se suele pasar de un smartphone o una cámara compacta de gama baja; en ambos casos, la absoluta automatización del disparo y la facilidad de manejo son dos argumentos que justifican no aprender nociones básicas en fotografía. De ahí, el miedo que sienten algunos usuarios potenciales para dar el salto a una cámara de óptica intercambiable.
La amplia gama de modos de exposición de la Olympus OM-D E-M10 Mark III facilitará al usuario más inexperto y temeroso acceder con seguridad y de la manera más sencilla a una de las cámaras Olympus mejor estudiadas, pues gracias a sus programas automatizados tan sólo deberá apuntar y disparar para conseguir buenos resultados. Los modos de exposición incorporados en la Olympus OM-D E-M10 Mark III son:
- Programa automático
- Prioridad a la abertura
- Prioridad al obturador
- Manual
- Bulb
- Tiempo
- i-Auto
- Modos de fotografía avanzada
- Modos de escena
- Filtro artístico
Modos de escena
En la época más oscura de la fotografía digital, los modos de escena llegaron para suplir la nula oferta de modos de exposición incluida en las cámaras compactas más sencillas. De aquellas carencias nacieron los modos de escena, donde el usuario puede seleccionar el modo a la situación que esté fotografiado. La pantalla LCD de la Olympus OM-D E-M10 Mark III agrupa todos los modos de escena en 6 ámbitos:
- personas
- escenas nocturnas
- movimiento
- escenario
- interior
- primeros planos
Cada uno de estos apartados dispone de hasta 6 modos de escena distintos (la Olympus OM-D E-M10 Mark III dispone de hasta 25 modos de escena diferentes), entre los que destacan:
- Retrato
- Paisaje
- Deportes
- Niños
- Estela de luz
- Estabilizador Escena Nocturna
- Fuegos artificiales
- Barrido
- Playa y nieve
- HDR retroiluminado
- Modo silencioso
- Luz de velas
- Macro
- Documentos
Modos avanzados de fotografía
Uno de los valores añadidos en la Olympus OM-D E-M10 Mark III son los modos avanzados de fotografía, que colmarán las necesidades de los usuarios más expertos. Lejos de ser una cámara de gama profesional, la nueva Olympus OM-D E-M10 Mark III es un modelo de iniciación que incorpora prestaciones que van más allá del precio que se paga y que ofrece una de las ofertas más amplias en modos de exposición. Los modos avanzados son:
- Composición en Vivo
- Live Bulb
- Exposición Múltiple
- Retroiluminación HDR
- Silencioso
- Panorama
- Corrección de líneas convergentes
- Horquillado AE
Filtros creativos
Olympus es –en mi opinión– el fabricante que ofrece mejores resultados en sus filtros artísticos. Tanto el número como los efectos de los filtros creativos incluidos en la Olympus OM-D E-M10 Mark III incrementarán la creatividad de los usuarios, mostrando una realidad alterada y con matices muy diversos.
“Todo depende del cristal conque se mire”, reza un dicho popular y Olympus nos ofrece la posibilidad de mirar a través de hasta 15 filtros creativos distintos:
- Pop Art
- Enfoque suave
- Color pálido
- Tono claro
- Blanco y negro antiguo
- Estenopeico
- Diorama
- Proceso Cruzado
- Tono Dramático
- Sepia
- Dibujo Coloreado
- Acuarela
- Coloreado parcial
- Vintage
- Bleach Bypass
Fotometría
La experiencia me ha demostrado que los diferentes modos de medición de luz de las cámaras Olympus (tanto las PEN, como la serie OM-D) ofrecen una respuesta muy precisa en todas las situaciones lumínicas, si bien es posible obtener un mejor rendimiento de la fotometría ajustando el modo más adecuado cuando se dispara en condiciones extremas de mucha luz o –por el contrario– en penumbra. El usuario de la Olympus OM-D E-M10 Mark III deberá experimentar por sí solo qué modo de medición de luz le ofrece más garantías en cada situación.
Los modos de fotometría de la Olympus OM-D E-M10 Mark III son:
- ESP
- Puntual
- Preponderancia al centro
- Luces altas
- Bajas luces
Balance de blancos
Dudo que el usuario promedio de la Olympus OM-D E-M10 Mark III se aventure a ir más allá del balance automático de blancos, pues –siendo sinceros– debemos admitir que en muy contadas ocasiones este modo de medición no ofrece una respuesta válida. Tan sólo en ambientes iluminados de manera exclusiva con luz de tungsteno o en días muy nublados sea más conveniente seleccionar en la Olympus OM-D E-M10 Mark III el parámetro por defecto.
Los modos de balance de blancos son:
- Automático
- Manual (2.000 – 14.000ºK)
- Tungsteno
- Fluorescente 1
- Luz solar
- Flash
- Nublado
- Sombras
Menú
El menú general de la cámara supone –en mi opinión– un claro paso atrás respecto al manejo y visualización de los dos modelos Olympus OM-D E-M10 , pues rompe con el diseño tradicional de los menús de Olympus. Algunos campos (incluso básicos y fundamentales, como es el menú de la cámara) muestran espacios vacío, tal vez a la espera de futuras actualizaciones de firmware, mientras que el nuevo menú personalizado dispone de hasta 11 pantallas distintas, lo que –para mí– ralentiza mucho la búsqueda, localización y ajuste de ciertos parámetros.
Estabilizador
Una de las prestaciones que más valoro en la Olympus OM-D E-M10 Mark III es su sistema de estabilización, que me ha permitido disparar con velocidades de obturación de hasta 1/6seg. a mano alzada y sin ningún tipo de apoyo. Muchos usuarios piensan que el uso del estabilizador se reduce a fotografías disparadas en interiores, sin embargo es posible crear imágenes irreales al mantener un punto de interés fijo, mientras los personajes que completan la escena aparecen movidos.
Otro de los motivos para utilizar el estabilizador es poder disparar con valores ISO más bajos en interiores oscuros, como iglesias. El sistema de estabilización de 5 ejes de la Olympus OM-D E-M10 Mark III facilita disparar con velocidades de obturación hasta 4 pasos más bajos. Por ejemplo, una fotografía cuya medición de luz fuese de 1/60seg. a 6.400 ISO podría dispararse activando el estabilizador a 1/4seg. y 400 ISO, con la consiguiente ganancia en calidad de imagen.
Visor
El visor electrónico de la Olympus OM-D E-M10 Mark III es idéntico al que incorpora su predecesora Mark II. Los 2,36 millones de puntos de resolución son –además de un estándar en muchas cámaras mirrorless– suficientes para obtener una buena visualización, tanto en exteriores como –especialmente– en interiores muy poco iluminados, donde el visor electrónico amplifica la iluminación. La información que ofrece el visor es muy completa y personalizable por el usuario.
Pantalla LCD
También la resolución de la pantalla LCD de la Olympus OM-D E-M10 Mark III es la misma que la ofrecida por la versión anterior; anclada en los 1.04 millones de píxeles, considero que la pantalla LCD –al igual que el visor electrónico– es uno de los aspectos que Olympus debería actualizar en futuras versiones. El sistema basculante y la tecnología táctil serán prestaciones muy apreciadas por los usuarios que graban vídeo y por los amantes de la fotografía macro en exteriores, que podrán obtener excelentes fotografías de una manera cómoda y rápida.
Sistema AF
Uno de los aspectos que ha mejorado en la nueva Olympus OM-D E-M10 Mark III es la respuesta del sistema de enfoque automático, gracias a un mayor número de puntos de detección de enfoque (121, respecto a los 81 de la versión anterior Mark II); la tecnología táctil de la pantalla LCD cubre la práctica totalidad del área de la imagen, con 800 puntos seleccionables. Hasta la aparición de la Sony A9, el sistema FAST AF de Olympus me había parecido el sistema de enfoque automático más rápido del mercado y la Olympus OM-D E-M10 Mark III mantiene una elevada velocidad de respuesta de foco.
Recomiendo a los usuarios de la OM-10 Mark III experimentar con los diferentes modos de enfoque y seleccionar el más adecuado a cada situación fotográfica, pues –pese a ser el modelo OM-D de iniciación– esta pequeña joya de Olympus dispone de las herramientas para obtener excelentes resultados en una amplia variedad de ámbitos fotográficos. La Olympus OM-D E-M10 Mark III dispone de los modos de enfoque:
- Enfoque manual
- Sencillo
- Continuo
- AF + MF sencillo
- Por seguimiento
- Detalle
Calidad de imagen
El nuevo procesador TruePic VIII es la única novedad remarcable y –en mi opinión– parece que aporta una mejor respuesta al disparar en ISO altos, el punto débil de las cámaras Micro 4/3. A día de hoy, no serán pocos los usuarios que piensen que una resolución de 16,1 millones de píxeles es insuficiente, pero cuántos de nosotros realizamos ampliaciones en papel a un tamaño de 50 x 75cm? ¿De verdad alguien sigue creyendo que con una mayor resolución obtenemos más calidad de imagen?
La Olympus OM-D E-M10 Mark III ofrece imágenes con una elevada calidad de imagen, incluso con el zoom de kit 14–42mm EZ. Las capturas ofrecen tonos contrastados y saturados, muy al gusto del usuario promedio de las cámaras de iniciación: cielos azules y verdes intensos que mejoran la realidad en la fotografía de paisaje.
Respuesta en ISO altos
Las cámaras Olympus mantienen la cordura que otros fabricantes han perdido al incorporar valores ISO incluso superiores al millón. La sensibilidad máxima ofrecida por la Olympus OM-D E-M10 Mark III es de 25.600 ISO y habla tanto de una mayor racionalidad, como de una respuesta más limitada al disparar con valores ISO elevados. Las sensibilidades superiores a 2.000 ISO suponen un obstáculo no siempre fácil de superar por la nueva Mark III, evidenciando que la respuesta en ISO altos sigue siendo una asignatura pendiente en las cámaras con sensor de formato Micro 4/3.
Personalmente, no recomiendo sobrepasar la cifra de 1.600 ISO, si se desea obtener una elevada calidad de imagen como la que necesitamos a la hora de realizar ampliaciones superiores a un 30 x 45cm. en papel fotográfico. Si las imágenes se utilizan para visualizar en medios digitales (web o redes sociales) es posible disparar hasta 6.400 ISO y obtener una calidad de imagen muy digna, aceptando –eso sí– compensar la pérdida de contraste y color a medida que se incrementa la sensibilidad.
Modo vídeo
Es el apartado que más se ha mejorado respecto a las versiones anterior. Gracias al procesador de imagen TruePic VIII el modo vídeo pasa a formato 4K, si bien para disfrutar de esta calidad calidad de vídeo deberemos disponer de un televisor 4K. El tamaño de las grabaciones en formato 4K dispara tanto el tamaño de las grabaciones como la tasa de transferencia de datos a la tarjeta de memoria, motivo que obligará al usuario de la nueva Olympus OM-D E-M1o Mark III a adquirir tarjetas SD de alta velocidad y capacidad, tipo UHS-II.
Las pruebas
Todas las fotografías se han realizado con el zoom de kit 14–42mm EZ y los objetivos fijos de la Serie PRO 25mm ƒ/1.2 y 45mm ƒ/1.2, empleando una amplia variedad de modos de exposición. En las manos no he apreciado un incremento sensible de la velocidad del sistema AF con el zoom del kit, mientras que las dos ópticas ultra luminosas de la Serie PRO ya mostraron una rapidez elevada con el modelo anterior OM-D E-M10 Mark II.
Tampoco el rendimiento fotográfico me ha mostrado mejores resultados que los ofrecidos por la versión anterior Mark II, lo que me lleva a pensar que el avance más importante en la nueva Olympus OM-D E-M10 Mark III se ciñe al apartado del vídeo, que ahora incorpora calidad 4K y en un mayor número de puntos de enfoque.
Conclusión
Olympus ha decidido mantener el sensor de 16,1 Megapíxeles en las tres versiones de OM-D E-M10. La nueva Olympus OM-D E-M10 Mark III sólo incorpora el nuevo procesador de imagen TruePic VIII como novedad. ¿Es entonces la Olympus OM-D E-M10 Mark III una cámara de continuidad? En mi opinión es un excelente modelo de iniciación. Es capaz de satisfacer las necesidades de los aficionados más exigentes.
El diseño y ergonomía de la Olympus OM-D E-M10 Mark III forman un conjunto de éxito que se refleja en las ventas. La multinacional nipona supo encontrar un concepto que aúna calidad y facilidad en el manejo. Todo a un precio más competitivo que sus rivales del entorno mirrorless. La esencia OM-10 se ha mantenido prácticamente intacto a lo largo de los años. Si funciona, no lo toques… Sin embargo, el nuevo menú se me antoja menos racional y más antipático.
Disparar con la Olympus OM-D E-M10 Mark III es reencontrarme con una vieja amiga, a la que hacía algo más de un año que no veía. La familiarización con la cámara es rápida, incluso para aquellos usuarios que jamás han tenido una cámara fotográfica. Es uno de los mejores modelos de óptica intercambiable para iniciarse en la fotografía. Ofrece más prestaciones que las que pueda asimilar y utilizar el aficionado más exigente.
La calidad de imagen es –hasta 1.600 ISO– elevada. El aficionado tendrá en la Olympus E-M10 Mark III una cámara para años y a la que no logrará exprimir todo su potencial. La calidad de imagen al disparar con sensibilidades elevadas es el talón de aquiles de las cámaras de formato Micro 4/3. Quedan limitadas a disparar a un máximo de 2.000 ISO, si se desea mantener una buena calidad de imagen.
Mantener la misma resolución, pantalla LCD y visor electrónico no hará que los usuarios de versiones anteriores migren a la versión Mark III. Es opción a valorar por aquellos aficionados que buscan mayor calidad en vídeo que las versiones anteriores. Sin embargo, la excelente relación calidad-precio de la versión anterior OM-D E-M10 Mark II.
Lo mejor
- construcción sólida
- diseño ergonómico
- modelo muy cómodo en las manos
- facilidad de manejo
- sistema AF muy rápido y preciso
- respuesta de la fotometría
- fiabilidad del balance automático de blancos
- amplia gama de objetivos
- buena relación calidad-precio: 499 euros (sólo cuerpo).
Mejorable
- modelo continuista y poco innovador
- mantiene la resolución de 16 Megapíxeles
- pantalla LCD de 1,04 millones de puntos
- velocidad de refresco del visor electrónico
- calidad a ISO altos
- el nuevo nuevo menú ofrece menos opciones y es menos intuitivo
- la versión Mark II (aún en el mercado) ofrece un precio sensiblemente inferior