Nikon abandona Japón
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Tras más de 70 años fabricando cámaras en suelo nipón, Nikon abandona Japón y traslada la fabricación de cámaras a Tailandia, en un intento de abaratar costes de producción y mejorar beneficios. La grave crisis que sufre la industria fotográfica por la pandemia del Covid-19 y –de manera particular– errores de diseño y fabricación de algunos modelos Nikon han llevado al gigante nipón a renunciar al tradicional “Made in Japan” que bautizaba a sus cámaras. Al menos, a las de gama más alta.
Quien fue el rey indiscutible en ventas de cámaras de 35mm es hoy una sombra de sí mismo. La progresiva e imparable caída en ventas de las cámaras Nikon se ha debido en gran parte a la dependencia de los sensores Sony y a una pésima gestión del I+D y a la nula visión de futuro de los “genios” encargados del márqueting de la compañía. Tras la venta de la división de Olympus a un fondo buitre, el porvenir de Nikon se antoja más oscuro que el color que viste la cubierta de sus cámaras.
Nikon cierra Sendai (Prefectura de Miyagi), la única planta de fabricación de cámaras que quedaba en Japón, para trasladar todo el peso de la fabricación de sus cámaras a la planta de Tailandia, incluido su buque insignia, la Nikon D6. Nikon abandona Japón, con todo lo que esto representa. Adiós al “Made in Japan”. Adiós a más de 70 años de historia y tradición. Y quién sabe si abrir de par en par las puertas a un adiós definitivo de Nikon…
